San Francisco.- El 12 de enero de 1997 fue el
cumpleaños de un objeto de ficción que apasiona los científicos y en particular los
especialistas de la inteligencia artificial. Es la fecha de nacimiento de HAL, la
computadora- héroe de la película 2001, Odisea del espacio, cuyo cometido es llevar a
bien una misión espacial de primera importancia para la humanidad. Realizada en 1968 por
Stanley Kubrick, la 2001 debe buena parte de su éxito y de su significado al hecho que es
una historia sobre la relación entre los humanos y sus máquinas contada por un maestro y
anclada en un conocimiento riguroso de las realidades tecno-científicas.
Así es como, casi 30 años más tarde, el
último juego alrededor de Silicon Valley consiste en hacer el balance de la realidad
tecno-científica a la luz de esta ficción, a medir el mundo inventado desde 1968 con la
barra de la imaginación de dos visionarios todavía activos.
Del lado de las desilusiones pondremos el hecho
que las estaciones orbitales habitadas son minúsculas comparadas a la de la película y
que las misiones espaciales lejanas, tipo Voyager, son confiadas a robots solitarios.
Del lado e las sorpresas positivas, uno de los
progresos que Kubrick y Clarke, el autor del libro en el cual está basada la película,
es la miniaturización de la informática y la generalización de la digitalización como
forma de almacenar y transportar información incluyendo a imágenes. Los astronautas de
la película utilizan cámaras análogas, cuando ya podemos sacar fotos de familia
digitales.
Pero la cuestión central de 2001 es la de la
inteligencia de las máquinas creadas por los humanos y capaces de rebasarlos. HAL le gana
al capitán de la nave en un partido de ajedrez. Sabemos desde el año pasado que aún el
mejor jugador del mundo puede perder un partido frente a una computadora especialmente
programada.
Sencillas computadoras ganan contra la mayoría
de los jugadores preparados. Las mejores máquinas ganan a los humanos con excepción de
un puñado... Y depende. Su superioridad total en este campo es probablemente cuestión
sólo de tiempo.
Menores, los progresos alcanzados en materia de
reconocimiento de la voz humana son respetables. Cualquier comprador de un Macintosh de
serie puede pedirle que le lea su correo electrónico o cualquier otro texto. Wildfire es
una computadora/secretaria que toma órdenes por teléfono a condición que sean dadas de
manera clara y que las palabras sean bien separadas.
Los programas más avanzados pueden reconocer
hasta 60 mil palabras, pero se enredan cuando escuchan frases pronunciadas de manera
normal. Y nada de leer sobre los labios como lo hace HAL para desarmar una maniobra de los
astronautas. Recurso dramático de primera importancia, se trata más bien de una licencia
poética.
En otra parte de la película, la computadora
HAL, reconoce sobre unos dibujos hechos por uno de los miembros de la tripulación las
caras de los individuos representados. Un logro. Pero el reconocimiento de las formas es
ahora posible. Algunos sistemas pueden reconocer humanos cuyas fotos tienen memorizadas.
Pero sólo pueden reconocer imágenes específicas, no las categorías, como sombrero o
casco, por ejemplo.
Las limitaciones que impiden crear computadoras
más inteligentes se deben en gran parte al hecho de que no conocemos suficientemente
cómo obra el cerebro humano para poder reproducir su funcionamiento. No logramos dotar
las computadoras con cualidades que poseemos, pero que no sabemos definir, explicar.
Se puede distinguir entre dos grandes escuelas en
la materia. Cada una es reivindicada por un equipo que se esfuerza en producir el HAL de
principios del próximo milenio. En Cambridge, Massachusetts, el Dr. Brooks considera a
Cog como un bebé y se preocupa por hacer que descubra la vida como si fuera un
niño. Cog tiene brazos, ojos, orejas. Su aprendizaje descansa en los sentidos (vista,
tacto, reconocimiento de los movimientos y de las caras, etc.) y Brooks quiere que aprenda
por sí mismo. Los investigadores que trabajan sobre Cog desde que tiene 3 años le
reconocen un mes de edad mental. La génesis es asunto de largo tiempo.
En Austin, Texas, el profesor Lenat prefiere
avanzar de manera lógica y dotar a Cyc de un banco de datos suficiente para que pueda
encontrar una respuesta frente a cualquier situación. Su equipo tiene 10 años de estar
alimentando la máquina con información del tipo las mesas son planas. Cyc ya
aprendió 2 millones de esas afirmaciones que constituyen según Lenat la base del sentido
común.
Estamos, una vez más, presenciando la lucha de
la mente contra los sentidos y no hace falta ser profesor universitario para pensar que
las dos concepciones ganarían en abordadas de manera conjunta.
En la práctica como en la teoría, las
investigaciones se topan con la cuestión del sentido común: no solamente hace falta
entender de qué se trata para poder recrearlo, es preciso tenerlo.
Brooks y Lenat reconocen haber sido profundamente
influenciados por 2001, que vieron en su adolescencia y que, según uno de ellos cambió
completamente el curso de mi vida. La prueba irónica es que, cada uno por su cuenta,
empezó por enseñarle a su máquina el respeto a la vida humana... para que no hagan como
HAL, que mata a la tripulación de la nave espacial.
Conclusión de algunos críticos: los
científicos tienden a subestimar la inteligencia humana. Es indubitablemente un error
común en los primeros científicos que se han dedicado a la inteligencia artificial.
Defecto simétrico: una computadora que puede realizar acciones inteligentes no
necesariamente es inteligente. Para Clarke, el autor de la novela, una computadora podrá
ser considerada inteligente el día en el cual será capaz de sentido del humor, sobre
todo si se toma a si mismo como objeto de su propia ironía. (¿Cuántos humanos
entrarían en la cuenta?)
La fuerza dramática de la historia contada por
Kubrick proviene de la oposición entre HAL y la tripulación. Puede ser atribuida a una
maquinación extraterrestre, a la superioridad de la máquina o sencillamente a una
equivocación. HAL muere hablando de sus emociones de sus pesares. Licencia poética que
nos da una bella película.
Pero no es la emoción lo que caracteriza lo
humano, es el error, algo que los tecno-científicos de Silicon Valley no aceptan
fácilmente. La creencia en la posible infalibilidad de la ciencia y de las máquinas
tiene mucha fuerza en parte por ser el espejo/espejismo de una soñada infalibilidad
humana.
San Francisco.- El ciberespacio marcha a paso
endiablado. Un tratado sobre la protección de la propiedad intelectual que todavía no
existe ya suscitó protestas por parte de algunos de los interesados.
Dicho tratado será discutido el próximo 2 de
diciembre en Ginebra por los miembros de la World Intelectual Property Organisation
(WIPO), Organización mundial para la propiedad intelectual) y tiene como objetivo poner
la protección de la propiedad intelectual y artística a la hora de la revolución
digital.
La Coalición AdHoc sobre la propiedad
intelectual (compuesta de AT&T, MCI, Netscape, America Online y la US Telephone
Association) emitió una protesta hecha pública el 12 de noviembre por MCI. Critica el
documento que debe ser sometido a la consideración del organismo de las Naciones Unidas
por hacer de los servicios en línea (tipo America Online o Compuserve) y de los
proveedores de acceso (tipo Spin, Laneta o Planet) responsables de la violación de los
textos. Protesta contra el hecho que sería ilegal operar un servidor sobre el cual
alguien hubiera subido una obra protegida por los derechos sobre la propiedad
intelectual y artística. Tal texto, estima, llevaría inevitablemente a hacer
descansar un peso insoportable sobre los servicios en línea y los proveedores de acceso.
Lo cual, según la Coalición, pondría en peligro el crecimiento de la Internet.
Apoyamos la adaptación de las leyes sobre
propiedad intelectual al ambiente digital, explica Timothy Casey, consejero de MCI
para tecnología, pero es fundamental para el crecimiento y para la salud de Internet
que se haga de una manera que tome en cuenta la realidad tecnológica única de la misma.
Apoyándose sobre el hecho que existen decenas de millones de sitios sobre la Internet
y, literalmente, se intercambian decenas de millones de mensajes a diario, estima que
sería imposible para los operadores cerciorarse que su contenido no viola la ley. Para la
Coalición, es quien utiliza de manera indebida material protegido por las leyes sobre la
propiedad intelectual y artística quien debería ser responsable y quien opera las
instalaciones utilizadas por el transgresor.
De hecho, estamos presenciando una repetición de
parte del debate que se dio en principios de año alrededor de la Communication Decency
Act votadas por el congreso de los Estados Unidos y firmada por el presidente el 8 de
febrero. Los proveedores de acceso habían manifestado claramente entonces que no se los
podía considerar responsables del contenido de lo que transita por sus cables y sus
computadoras por la misma razón que las compañías telefónicas no son responsables de
las barbaridades que se dicen sobre sus líneas.
El problema de la propiedad intelectual y
artística es (junto con el de la seguridad) uno de los más delicados que suscita la
expansión de las tecnologías de la información y de la comunicación (TIC). La
Internet, y notablemente su parte multimedia, la World Wide Web, permiten a cualquiera
acceder a documentos (textos, sonidos, imágenes) de cualquier lugar del mundo. Sea cual
sea la técnica de acceso utilizada, la digitalización permite, además, obtener copias
perfectas, indistinguibles del original.
Esta doble evolución vuelve inoperantes las
leyes y acuerdos existentes sobre protección de la propiedad intelectual y artística de
la cual viven empresas, artistas e intelectuales, pero, aun cuando un gran número de
actores y de interesados estiman necesario ponerlas al día, ningún concepto claro ha
surgido todavía sobre cual sería la mejor forma de proceder.
Los miembros de la Coalición AdHoc se declaran
respetuosos de las leyes de protección de la propiedad intelectual y artística y estiman
que las modalidades de control consideradas por el organismo internacional, podrían
además tener consecuencias sobre la libertad de expresión.
Obligados a vigilar el contenido, proveedores de
acceso y servicios en línea tendrían la tentación de ser muy estrictos para protegerse
contra posibles acusaciones. Es una tendencia que ya se ha materializado en el contexto de
la ley sobre la decencia aún cuando esta ha sido juzgada inconstitucional por un
tribunal de Filadelfia, hasta que la corte suprema falle sobre la materia.
Los ejemplos más conocidos son dos medidas
tomadas por America Online. En un caso, esta compañía eliminó todos los mensajes que
contenían la palabra pecho y afectó de esta manera el funcionamiento de los
grupos de solidaridad de mujeres víctima de un cáncer del seno (breast cancer, en
inglés).
En otro caso, America Online sencillamente
prohibió el acceso al sitio de la Casa Blanca bajo el pretexto que los niños podían
tomarse en referencia a Bill Clinton, Al Gore y sus respectivas esposas, la palabra pareja
de reconocido uso pornográfico. En ambos casos, la compañía tuvo que retractarse.
San Francisco.- Cada vez con mayor frecuencia,
las empresas recurren a los gadgets electrónicos portátiles para mantener a sus
empleados en comunicación, tanto entre ellos como sus superiores, y con la información
disponible en la sede de la compañía. Sin embargo, las compañías aún no se deciden
sobre las restricciones que deben regular su uso.
Reunidos bajo el nombre de Portable Personal
Technologies (Tecnologías Personales Portátiles, o TTP), estos aparatos incluyen
teléfonos celulares, bipers, computadoras portátiles, asistentes digitales personales,
etcétera. Incrementan la eficacia. Pero de manera paralela a esta evolución
tecnológica, han emergido nuevas formas de trabajo y de relación entre las personas que
pueden representar problemas de difícil solución. El uso de las TTP acarrea
inevitablemente abusos y, con frecuencia, suscita reacciones adversas de los superiores y
de los empleados. Una de las trampas de las tecnologías de la información y la
comunicación (TIC) es que es más fácil adquirirlas e incluso aprender a utilizarlas,
que ajustarse a los cambios de mentalidad que las acompañan.
Los especialistas de la organización del trabajo
y de la vida en las empresas se encuentran divididos a la hora de formular posibles
respuestas a este fenómeno, como revelan dos artículos aparecidos casi simultáneamente
en dos revistas especializadas.
El primero, publicado en Beyond Computing, parte
del conflicto en una empresa que distribuyó mini-terminales portátiles entres sus
vendedores de puerta en puerta, para permitirles el contacto con sus responsables y el
acceso a la información depositada en la computadora central. Al darse cuenta que se
valían de ellas con mucha frecuencia para realizar comunicaciones personales, la
dirección realizó una evaluación, facilitada por la misma naturaleza de la tecnología,
y decidió retirar el aparato a uno de sus empleados. Preocupados, los demás comenzaron a
utilizar menos sus TTPs y la productividad bajó.
En el mismo artículo, la revista destaca además
el problema de otra compañía que repartió computadoras portátiles a sus empleados para
que trabajaran donde fuera y a la hora que fuera. Muchos aprovecharon la
oportunidad para organizar mejor sus vidas y trabajar con más frecuencia desde el hogar,
pero en el momento en que un ejecutivo llamó a una empleada durante el fin de semana para
exigirle que se ocupara de una tarea no prioritaria, ésta protestó enérgicamente
argumentando que, salvo en caso de crisis, el sábado y domingo le pertenecían. La
revista, que constata que el trabajo fuera de la sede de una empresa resulta muy ambiguo-
nadie puede medir con exactitud los minutos de trabajo y los que se dedican a arreglar
asuntos personales-, considera este ejemplo como ilustrativo de una tentativa de ejercer
control sobre los empleados, en este caso sobre el manejo de su tiempo, que incluye el fin
de semana.
Beyond Computing diagnostica dos errores: la
entrega de TTPs no fue acompañada de un juego de reglas precisas, y hay que distinguir
entre la difusión de estas tecnologías y su uso para tareas de control. A falta de
esta diferenciación, los trabajadores piensan que el propósito de repartir los aparatos
es vigilarlos más de cerca y entonces manifiestan preocupación.
El artículo publicado por Mobile Office un mes
después va más lejos. Se inspira en estudios realizados por el Massachusetts Institute
of Technology, que concluyen que la innovación surge al poner en contacto permanente a
gentes con experiencia y formación y prácticas diferentes. Los intercambios en el sitio
de trabajo son esenciales. Se refieren muy seguido a un programa de televisión
transmitido la noche anterior, a los resultados en algún deporte o a un buen sitio
recién descubierto. De cuando en cuando, la conversación se centrará alrededor de un
problema de trabajo que los empleados tratan de resolver, afirma el autor.
Los edificios más modernos han sido concebidos
para propiciar este tipo de encuentros, pero lo anterior no tiene ningún efecto entre los
trabajadores móviles y es necesario por lo tanto permitir que se comuniquen más. Y no
sólo al interior de la empresa. Algunas de la compañías con mayor avance en lo que se
refiere a las TIC alientan a sus empleados a comunicarse con la familia y amigos, e
incluso les proporcionan buzones electrónicos personales que pueden usar con libertad. No
es fácil medir los resultados inmediatos pero Mobile Office considera que una actitud
como ésta contribuye a la capacidad de una empresa de prosperar.
Moraleja: las TIC no son neutrales, valerse de
ellas acarrea inevitablemente consecuencia en aquellas esferas donde la evolución se
produce a un ritmo más lento, como la organización del trabajo o las relaciones humanas.
Al permitir, por ejemplo, a los empleados el contacto con su sede, las TTP los liberan de
la restricción geográfica que consiste en asistir cotidianamente a una oficina, pero les
imponen una nueva restricción temporal ya que su colaboración puede ser requerida en
cualquier momento. Las empresas ganan en flexibilidad- y eficiencia-, pero es de esperarse
que los empleados se pregunten porqué ellos no pueden también aprovechar las nuevas
tecnologías, al menos en parte. Ignorar estas dimensiones sólo puede conducir a
desventuras, como en el caso de la empresa donde la reacción de los trabajadores produjo
un descenso en la productividad.
El artículo Beyond Computing comienza con la
siguiente pregunta ¿Puede la dirección diseñar prácticas y políticas que permitan
a los empleados beneficiarse con las nuevas tecnologías portátiles sin crear reacciones
opuestas? Pregunta equivocada. La verdadera cuestión está en saber si es posible
limitar el impacto del uso de las TIC en las esferas de la tecnología y la economía. La
respuesta: no. Podemos aventurar incluso que para obtener mejor resultado no sólo hace
falta contar con los medios para realizar costosas inversiones tecnológicas, es
igualmente necesario tener la audacia de enfrentar con creatividad las modificaciones en
las relaciones humanas y sociales que producen.
(...) un grupo de empresarios está trabajando
con el objetivo de crear una agrupación que reúna a todos los miembros de la industria
de las nuevas tecnololgías de la información, buscando fomentar la cultura y el
desarrollo de la informática, además de que represente y defienda sus legítimos
intereses.
Actualmente los empresarios informáticos cuentan
para estos menesteres con la Cámara Nacional de la Industria Electrónica y de
Comunicaciones Eléctricas (Caniece) y la Asociación Nacional de la Industria de
Programas para Computadoras (Anipco), pero ahí no están todos los que son, ni son todos
los que están. La industria creció y sus actores son otros.
(...)
Jesús De La Rosa, ejecutivo de IBM de México, y
actual presidente de la Anipco, se ha dado a la tarea de convocar a diversos empresarios
para analizar la factibilidad de crear la Asociación Nacional de la Industria de las
Tecnologías de la Información (Aniti), (...).
El concepto es agrupar a los diferentes sectores
en seis secciones especializadas: fabricantes de hardware, desarrolladores de paquetes de
software, desarrolladores de software a la medida, integradoras de sistemas,
telecomunicaciones, servicios y comerciales, de tal forma que el organismo integre, ahora
sí, a todo mundo.
San Francisco.- (...) el fenómeno importante es
la emergencia de una nueva clase, de un nuevo grupo conocido como trabajadores del
conocimiento (knowledge workers), compuesto por quiénes juegan un papel clave en una
economía en la cual el acceso, el control y el manejo de la información cuentan más que
la producción de acero, aluminio e, incluso, petróleo.
(...)
Los trabajadores del conocimiento son optimistas
y convencidos de que controlan el futuro. Confían poder adaptarse a los cambios. no
comparten los miedos de la mayoría de los estadounidenses: recesión económica,
inflación, competencia más dura con el exterior, y el descalabro de la bolsa de valores.
Están convencidos de estar cabalgando el caballo ganador. Las tres cuartas partes de
ellos piensan que su nivel de vida aumentará aun cuando el del resto de los
norteamericanos corre el riesgo de empeorar. Pero tienen algo que ofrecer: Si el
optimismo nos caracteriza, dice Paul Saffo, del Instituto para el Futuro de Menlo Park
en pleno corazón de Silicon Valley, nuestra contribución intelectual más importante
para el resto del país es nuestra capacidad para enfrentar las incertidumbres. Porque
oportunidades e incertidumbres vienen juntas.
Más que el resto de los norteamericanos, los
trabajadores de las TIC (tecnologías de información y comunicación) cuentan consigo
mismo antes que nada, confían en sus conocimientos y su espíritu emprendedor.(...)
Monterrey.- ¿Un Municipio virtual en Nuevo
León?
Aun no existe como tal, pero en San Pedro, que
forma parte del área metropolitana de Monterrey, las autoridades trabajan para lograr que
el próximo año la comunidad no tenga que desplazarse para solicitar un trámite o pedir
información sobre permisos y reglamentos.
El primer paso en su entrada a la Súper
Carretera de la Información lo dio San Pedro hace unas semanas al montar su home page en
la Red, y se considera el único en el Estado en estar presente en el ciberespacio.
En su etapa inicial, la página ofrece
información sobre el Municipio, su historia, las festividades relacionadas con su
aniversario número 400, los reglamentos municipales y su estructura orgánica.
Cuenta además con una sección llamada entra
en contacto para que la comunidad exprese sus inquietudes a través del correo
electrónico.
Niños, jóvenes y adultos pueden enviar sus
sugerencias directamente al alcalde en turno, Fernando Margáin, o a los titulares de las
diferentes secretarías, quienes tienen una cuenta de correo electrónico que aparece
enlistada en el site.
Más que dar información turística o
histórica, el objetivo de la página en Internet es fomentar la participación de la
ciudadanía porque muchas veces la gente está inconforme con algo o quiere aportar alguna
idea y no lo hace porque no sabe a dónde ir y con quién, expresa Ana Luisa Laurent
Kaullick, directora de administración y sistemas del Municipio.
En la sección de estructura orgánica aparece
una lista de las dependencias y secretarías que conforman la administración pública de
San Pedro y al dar un click en cada una se detalla su función y objetivos.
Por ejemplo, se puede acceder a datos sobre cuál
es la misión de los jueces auxiliares, del personal del DIF, y también se puede saber
quiénes integran el cabildo o conocer el organigrama de cada secretaría.
Laurent Kaullick comenta que con la lista de
direcciones de correo electrónico del responsable de cada dependencia y del mismo
munícipe, la comunidad cuenta un medio directo para canalizar el problema o sugerencia
que quiera proponer a la persona indicada.
(...)
Nuestro objetivo es crear un municipio virtual
para que la gente no tenga que desplazarse hasta la presidencia o a las secretarías para
solicitar un permiso o hacer un trámite (...).
París.- (...)
Conocemos ya las redes clandestinas, las de vías
de tren o del sistema nervioso. Entre las muchas definiciones que ofrecen los
diccionarios, reproducimos aquí algunas que ilustran nuestro punto: Conjunto de
tuberías, cables de conducción, vías de comunicación o cosas semejantes. Un
entrecruzamiento o enrejado de líneas. Organización de servicios o cosas enlazadas o
relacionadas entre sí. (Diccionario María Moliner). Las características de la red
que más llaman la atención hoy en día son la flexibilidad, el flujo de información no
sólo de arriba hacia abajo o incluso de abajo hacia arriba sino en todas direcciones.
(...)
A manera de ejemplo, resulta interesante analizar
la forma en que el gobierno de Francia, modelo del Estado centralizado, aborda la
Internet. El sitio de Matignon (sede oficial de las oficinas del Primer Ministro) acaba de
inaugurarse. En él se encuentran algunos clips sobre la vida y las convicciones de Alain
Juppé, y datos todavía parciales y oficiales sobre el gobierno y sus actos. Está
previsto un espacio de diálogo, en el que ni Juppé ni sus colaboradores van a
participar. La página ancla está aderezada con tres íconos con los colores de la
bandera francesa, pero los expertos en informática no han logrado todavía resolver todos
los problemas de los acentos. Así que algunas palabras aparecen desfiguradas por signos
cabalísticos. Mala suerte.
El primer ministerio en contar con un sitio en la
Web fue el de Cultura. Y eso se remonta a junio de 1994. Desde entonces, la mayor parte de
las dependencias se han conectado. Con frecuencia, la iniciativa proviene de algún
empleado de informática que instaló el sitio sin pedir permiso. Resultado: las
autoridades tuvieron miedo de la cacofonía, o sea justamente de aquello que constituye el
interés de la Internet, pero que cuestiona hondamente la centralización en que se
sustenta la administración francesa. Y el Servicio de Información del Gobierno (SIG),
con sede en Matignon, decidió convertirse en el director de la orquesta.
(...)
El propósito del gobierno francés de figurar en
la Red choca con tres grandes obstáculos al menos: el temor a exponer información
secreta (legítimo, pero existen soluciones técnicas); la falta de maestría de las
formas interactivas (eso se aprende); la concepción francesa de la jerarquía y el
centralismo. Sacar provecho del nuevo medio requiere una verdadera revolución cultural,
en la medida en que éste tiende a provocar un corto circuito en la jerarquía.
Monterrey.- Alrededor de 5 mil millones de pesos
ahorrará el Gobierno Federal al año con la implementación del sistema electrónico de
compras por Internet, indicó la semana pasada Carlos Jasso García.
Al participar como conferencista en la Internet
World Monterrey 96, el coordinador general de la Subsecretaría de Atención a la
Ciudadanía y Contraloría Social, dijo que se estima un incremento en el número de
empresas interesadas en participar en concursos de gobierno.
De acuerdo con un estudio hecho por Gallup
México se prevé que a través del sistema electrónico, el número de participantes
aumentará entre un 3 y 15 por ciento y por consecuencia se reducirán los precios de los
bienes y servicios que se adquieran, expreso Jasso García.
El sistema llamado Compranet surgió a
iniciativa de la Secretaría de la Contraloría con la intención de que un mayor número
de empresas, sobre todo del interior del País, participaran en los concursos convocados
por el Gobierno Federal para la adquisición de bienes y obra pública.
Actualmente se encuentra en desarrollo pero ya es
posible consultar información a través del Internet sobre las convocatorias vigentes, el
programa anual de adquisiciones, los fallos de este año y el pago de las bases del
concurso.
Como medio para agilizar la investigación y
consulta de diferentes ordenamientos jurídicos relacionados con el comercio, la banca,
los sectores financiero y laboral, administración pública, economía y jurisprudencia,
la compañía Ediciones Legislativas de Consulta Especializada liberó el paquete Ley Lex.
Permitirá el nuevo sistema Simbad consultar más
de 16 mil variables estadísticas
Como parte del Plan Nacional de Desarrollo y como
objetivo prioritario de la Presidencia de la República para modernizar la operación de
la Administración Pública, a fin de evitar burocratismos, discrecionalidad y abusos, se
llevó a cabo el seminario Tecnologías de la información para el Desarrollo de la
Administración Pública '96 y la exposición Gobierno 2000.
La Secretaría de Transporte y Vialidad del
Distrito Federal ha implementado una serie de soluciones tecnológicas diseñadas para
hacer eficientes los procesos administrativos relacionados con la expedición de
licencias, inventario de infracciones y registro público del transporte, entre otros.
Sistema Internet de la Presidencia
Consulte el Segundo Informe de Gobierno, y otros
documentos de interés nacional.
http://www.presidencia.gob.mx
Muchos usuarios se quejan de que los productos
computacionales que adquieren tienen problemas y algunos de ellos contienen errores de
fabricación que los transforman en herramientas peligrosas o al menos poco confiables.
Quizá sea algo bueno que las computadoras no
hayan evolucionado tan rápido como se predijo en la película 2001: odisea del espacio.
Imagínese el manual de usuario para Hal, la computadora pavorosamente inteligente de la
película estrenada en 1968.
O todavía peor, imagínese lo complejo que
sería la vida con un Hal en su escritorio: Buscando quedarse con su empleo, podría
tergiversar sus notas de su más reciente viaje de trabajo, introducir errores en sus
hojas de cálculo, reducir su cuenta de gastos y enviar correo electrónico secreto a su
jefe, criticando el desempeño de usted.
La investigación en torno a la inteligencia
artificial tiene mucho camino que recorrer antes de que las computadoras se vuelvan así
de altaneras. Pero Hal parecerá estar mucho más cerca para el año 2001 si dos de los
rivales más ambiciosos de las ciencias computacionales, Douglas Lenat y Rodney Brooks,
logran incluso una fracción de lo que se proponen.
Mientras que la mayoría de los investigadores
avanzan en la construcción de máquinas verdaderamente inteligentes a pasos pequeños,
Lenat y Brooks están contendiendo por lograr un salto gigantesco.
Las máquinas tan inteligentes como Hal han sido
el Santo Grial de los científicos computacionales desde las épocas de la Univac. La
inteligencia artificial (IA) extenderá el poder de la mente humana de la misma forma en
que las máquinas multiplican el poder del cuerpo.
Las computadoras se volverían nuestros
omnipresentes médicos de cabecera, magos de inversión, asesores legales y tutores. Al
conocernos, adaptarían la información de acuerdo a nuestros intereses y el
entretenimiento según nuestras preferencias. Serían unos colmilludos consultores
administrativos, buscando y analizando constantemente datos de los mercados, de la
economía, de la competencia. Nos ayudarían a ganar miles de millones de pesos.
Pero al igual que Hal, que no solamente hablaba y
pensaba sino que también conspiraba sanguinariamente como un humano, la verdadera IA
despertaría cuestiones profundas y sin precedentes. ¿Podríamos confiar en máquinas
inteligentes que funcionaran mayormente por cuenta propia? ¿Se deben otorgar derechos
inalienables a piezas de equipo aparentemente conscientes? ¿No sería cruel apagarlas?
Lenat expresa: La inteligencia artificial sería un cambio probablemente tan
fundamental para nuestra especie como el desarrollo del lenguaje.
El enfoque de Lenat involucra nada menos que
intentar resolver uno de los más difíciles retos de la computación: enseñarle a una
máquina sentido común. Patrocinado por un consorcio de alta tecnología de Texas, ha
encabezado el desarrollo de una extensa base de conocimiento de las cosas que la
mayoría de la gente sabe. Denominado Cyc, el sistema puede volverse lo suficientemente
inteligente como para expandir su conocimiento al combinar textos automáticamente. Realmente
espero, afirma Lenat, que dentro de seis años Cyc tenga los recursos y el know-how
que tiene la persona promedio para obtener información. El resultado final: La cosa
evolucionaría por sí misma al nivel de Hal.
Nadie sabe cuántos bits de conocimiento necesita
Cyc para que logre la grandiosa visión de Lenat. Hace unos cuantos años, él y un colega
declararon en un reporte de investigación que la meta era alrededor de 100 millones de
axiomas, que es más de 200 veces el actual tamaño de Cyc.
Conforme proliferan las reglas de Cyc, un
problema grande se hace todavía más grande: sacar las relevantes del montón. Al
preguntársele si los cerdos pueden volar, los humanos instantáneamente se centran en la
información relevante que está en su memoria, ignorando lo demás. Los sistemas expertos
constituyen con cruda velocidad esta misteriosa selectividad; los programas de ajedrez,
por ejemplo, pueden analizar miles de posibles posiciones antes de mover.
Semejantes métodos de fuerza bruta no funcionan
con Cyc, ya que incluso los circuitos más rápidos se atascarían al repasar su tremenda
variedad de reglas. Además, Cyc tiende a desconectarse con sutiles inconsistencias cuando
considera demasiadas reglas a la vez, algo así como la confusión que tendría un
pequeño al decirle tanto que Drácula no es real y que Drácula tiene dientes muy
filosos.
Intentando llegar a Hal a partir de una
dirección completamente distinta, Brooks lanzó un proyecto de cinco años para construir
un robot humanoide que aprenderá interactuando con las personas, tal como lo hacen los
bebés. Llamado Cog, está inspirado en el pionero trabajo de Brooks en el Instituto
Tecnológico de Massachusetts (MIT) con robots tipo insecto, criaturas rastreras
mecánicas que presentan una conducta misteriosamente compleja a pesar de sus sencillos
cerebros electrónicos. Un robot, diseñado para los militares, es un ingenioso
dispositivo kamikaze; con la forma de un cangrejo grande y repleto de explosivos
plásticos, está diseñado para arrastrarse en aguas bajas cercanas a la playa, buscando
minas con sensores que tiene en las patas. Al encontrar una, se entierra al lado y luego
¡pum!, adiós mina.
Para empezar, Cog tendrá poco conocimiento, pero
estará equipado con sistemas motores y sensores que le permiten aprender tocando, viendo
y escuchando. La inteligencia no puede estar separada de la experiencia subjetiva de un
cuerpo, declaran Brooks y su colega Lynn Andrea Stein en un artículo donde proponen
al humanoide.
Olvídense de vaciar conocimientos
enciclopédicos en una caja. La inteligencia de Cog estará basada en cómputos de
información sensorial.
Es posible que ni Brooks ni Lenat se aproximen a
Hal: la falta de fondos para la investigación y desarrollo de alto riesgo podría
paralizar los proyectos incluso si superaran las dificultades técnicas. Sin embargo, el
trabajo ya está definiendo esta extraña frontera de las ciencias computacionales.
Randall Davis, presidente de la Asociación Estadounidense de Inteligencia Artificial
comenta: La inteligencia artificial siempre ha tenido altas aspiraciones. Soug y Rod
están a la cabeza de la cruzada.